Juguetes de búsqueda para perros
Te explicamos como sacarle el máximo partido a los juguetes de búsqueda para perros, entendiendo el objetivo y la finalidad que tiene el perro al interactuar con ellos. Te recomendamos que leas nuestro artículo Tipos de juguetes para perros si aún no lo has hecho.
Los juguetes de búsqueda quizás sean uno de los tipos de juguetes para perros más habituales que, sin embargo, son de los peor utilizados.
Lanzar un objeto una y otra vez para que el perro lo busque es un grave error que debemos parar Ya mismo.

Los juguetes de búsqueda imitan y recrean la persecución, la caza y el cobro de una presa. Un perro jamás encontraría 50 conejos, uno detrás de otro, en la naturaleza ni los cazaría a todos.
Hasta ahora, has pensado que, jugar así, era una forma divertida de cansar a tu perro sin darte cuenta de que no es, para nada, un comportamiento natural y que puedes estar provocando ansiedad, obsesiones e hiperactividad en tu perro.
Aprender a utilizar correctamente los juguetes de búsqueda puede mejorar considerablemente la relación que tenemos con ellos, además, los perros pueden aprender a controlar la excitación y mejorar en la coordinación de movimientos.
Si crees que tu perro puede estar obsesionado con la pelota, lee este artículo antes: Mi perro está obsesionado con la pelota – Cómo remediarlo.
ACLARACIÓN: Las comparaciones con la naturaleza que hacemos aquí no significan que el perro esté pensando en los estímulos naturales cuando lleva a cabo el comportamiento, sino que, realiza dicho comportamiento, porque es propio de su naturaleza. Los juguetes no fomentan la agresividad si se emplean correctamente.
Cómo motivar y jugar
Puede que alguna vez hayas lanzado un objeto con la intención de que tu perro corra a buscarlo y hayas terminado yendo tú a recogerlo. Tu perro se ha quedado ahí pasmado, observando las «cosas raras» que haces y después ha seguido a lo suyo, ignorándote.
Esto ocurre porque no hay ni un interés ni una motivación previa por parte del perro hacia ese objeto. Recuerda que, el juguete representa a un animal, a una posible presa, por lo que antes de lanzarlo, de «ponerse a correr», debe aparentar estar «vivo».
Esto se consigue simplemente moviendo el objeto de un lado a otro antes de lanzarlo.
Si, por ejemplo, tengo intención de lanzar una pelota, llamaré a mi perro y, en el instante en que me mire, sacudiré la pelota sin soltarla, la botaré o la lanzaré al aire manteniéndola conmigo. Cuando vea que mi perro muestra interés y viene a descubrir lo que sostengo, seguiré moviendo el juguete hasta que vea que realmente tiene intención de agarrarla. En el momento que mi perro muestre la máxima motivación, lanzaré el juguete a corta distancia para que lo persiga brevemente y lo «cace» rápido.
Después de esto pueden pasar tres cosas:
- Que el perro lo huela y ni lo coja.
- Que el perro lo coja y se vaya corriendo.
- Que el perro lo coja y venga hacia ti.
Vamos a entender cada una de ellas con detalle.
1. Lo huele, pero no lo coge.
Muy bien, si tu perro hace eso, tienes a un perro inteligente o no le has provocado lo suficiente.
Cuando el perro se da cuenta de que eso que le tiras no es «nada», es decir, no es ni un animal vivo ni nada para comer, se da media vuelta y se va a hacer algo más interesante.
En ese momento debes ir corriendo hacia el juguete y «cazarlo» tú; lo coges rápido, juegas con el juguete un rato lanzándotelo a ti mismo y lo guardas. Tu perro te mirará.
Si tu perro se acercara otra vez para investigar qué tiene ese juguete de tan interesante que él no descubrió antes, no se lo des. Lo guardas y mañana repites el proceso. Así mantendrás su curiosidad.
Puede que lo tengas que hacer varios días o incluso varias semanas. No te desanimes. Si el perro ve que tú te lo pasas bien con el juguete, tarde o temprano querrá unirse al juego.
2. Lo coge y se va corriendo
Si tu perro persigue el juguete, lo coge y se va corriendo… ¡Está bien! ¿Quién ha dicho que te lo tenga que dar? ¿Para qué debería hacer eso?
Recuerda que es una «presa», ya lo cazó, ahora toca morderlo, llevárselo lejos para que los demás no lo cojan o llevarlo a su familia (a ti) para que disfruten de él. Todas las opciones son válidas.
El perro no piensa en traértelo para que se lo lances otra vez. Sin embargo, es eso lo que acaba aprendiendo porque es lo que le acabas haciendo tú una y otra vez, pero esa no es, ni debe ser la finalidad del juego.
Si se va corriendo, persíguele un rato. ¡Síguele el juego! Que consigas coger el juguete o no es indiferente. Si te cansas, para. Si se cansa él, parará, soltará el juguete y seguirá a la suya.
Entonces recoge el juguete y guárdalo. ¡Ya está!
Puedes finalizar el juego en ese momento o puedes volver a jugar al cabo de un rato, pero no se lo tires si el perro te lo está «pidiendo». Simplemente, ahora, la «presa» es tuya y no se la vas a dar.
Esto evita comportamientos indeseados como el ladrido excesivo, las obsesiones, la impaciencia, la desatención, etc.
Que no te de ninguna pena no lanzarle el objeto de nuevo. Es por su bien y por el tuyo. Recuerda que menos es más; menos cantidad, pero más calidad.
3. Lo coge y se acerca a ti
Muchos perros traen los objetos hacia sus propietarios porque forma parte de su naturaleza; los lobos, después de cazar, cargan con las presas hasta su territorio para dar de comer a los cachorros o alimentarse más tarde.
Pero… No te creas que todos lo traen y lo sueltan así de fácil. Muchos quieren jugar al «A ver si lo coges». Así que… cuando te propones estirar tu brazo para cogerle el juguete de la boca a tu perro, él se aparta y/o se van corriendo. No lo suelta. ¡Está bien! ¡Vuelve a seguirle el juego!
Se trata de variar, de probar cosas nuevas. Si siempre es lo mismo, monótono y repetitivo, es muy aburrido. Por eso hay perros que, a la segunda vez que le lanzas el juguete, ya no van a por él. El juego ha perdido toda su gracia.
Otra cosa que puedes hacer cuando se acerque a ti es Nada. Sí, sí, NADA. No lo toques, no intentes coger el juguete, solo obsérvale. Verás cosas que no sabías y puede que te sorprenda ver cómo suelta el juguete en tus pies.
A tener en cuenta
Los juguetes de búsqueda solo deberían utilizarse para ese fin. No dejes que se queden por el suelo de casa todo el día. Guárdalos cuando el juego se haya terminado, así conseguirás que duren meses e incluso años y tu perro siempre estará motivado y dispuesto a jugar.
Tipos de juguetes de búsqueda
¡Bien! Ahora que ya sabes cómo jugar, tienes que saber que existen muchos tipos de juguetes de búsqueda. Elige el que creas que va a motivar más a tu perro.
Pelota con cuerda
Las pelotas con cuerda son nuestras favoritas.
Te permiten mover la pelota y provocar a tu perro con mucha soltura; a ras del suelo y en el aire. Es genial para perros que, hasta ahora, no han tenido mucho interés en este tipo de juegos.
Hemos seleccionado la pelota con cuerda de Julius K9, ya que está hecha de materiales muy duraderos y la goma es blanda, cosa que les encanta a los perros.
Pelota chirriadora
Esto no es una pelota cualquiera. Te aconsejamos que no utilices pelotas comunes de tenis, se rompen con facilidad y pueden ser tóxicas.
Esta pelota de la marca Kong chirría cuando el perro la aprieta. El ruido hace que el perro recree el chillido que su presa haría al ser cazada. Por eso muchos perros no paran de masticar este tipo de juguetes hasta que «mueren», es decir, hasta que se rompen.
Esta pelota es mucho más resistente y duradera que cualquier simple juguete chirriador. ¡Pruébala!
Frisbee
El frisbee requiere un poco más de práctica y técnica si quieres conseguir que tu perro lo cace al vuelo, pero es ideal para la coordinación de movimientos. ¡Tanto de tu perro como los tuyos!
Este frisbee de la marca Kong es super resistente, vuela perfectamente y a los perros les encanta.
Cerdito gruñón
Este juguete de la marca Rosewood también suena cuando se aprieta imitando al sonido de un cerdito.
Es genial para atraer y motivar la atención de los perros. Algunos se asustan al principio, así que también te servirá para trabajar el miedo.
No te lo recomendamos si tu perro tiende a romper los objetos con mucha facilidad, aunque este juguete es de látex y bastante duradero, no es eterno.
Disponible en dos medidas.
¿Te ha servido de ayuda? ¡Déjanos tu opinión y comparte este post con tus amigos!